Steel Fringe debutaron el año pasado con un sensacional EP compuesto por cuatro temas que nos dejó noqueados con un breve tratado de americana cósmica y psicodelia por parte de los de Portland.
Steel Fringe capturan a la perfección la mística de la Costa Oeste donde también hay horizontes más expansivos incrustados, montañas, cascadas de tonos verdes, mucho sol, armonías suntuosas y mucha neblina como en “Days gone by“, temazo que dura más de diez minutos.
Country melancólico y psicodelia potente que se fusiona en un impresionante ciclo de canciones de casi 25 minutos. La pura belleza de sus composiciones lo dice todo, pero no es uno de esos discos simplemente bonitos. Tiene profundidad, e incluso algunos momentos que te hacen mover los pies, lo que en conjunto lo convierte en un pequeño álbum brillante.
Uno de los cantantes principales. Tyler Johnston tiene una panadería local, y su pasión por la repostería se refleja en todo, desde la portada y la receta del pan de masa madre campestre impresa en el interior del disco. Steel Fringe son: Mitch Gonzales, Parker Hall, Erik Clampitt, Tyler Johnston y Nathan Murphy, realizaron uno de los grandes discos del año pasado a pesar de ser un EP.