The Georgia Thunderbolts llegó a la sala Wolf para su puesta de largo oficial como protagonistas de cartel. Y Barcelona respondió a su llamada.
Son muchos los nombres de bandas jóvenes dispuestas a caminar por la senda que grupos como Lynyrd Skynyrd o Allman Brothers iniciaron en su dia. Rock sureño de alto octanaje actualizado para poder defender ese legado. En su última visita fueron los invitados de Black Stone Cherry, pero con su segundo trabajo “Rise Above It All”, The Georgia Thundebolts ya comienzan a volar por sí solos. Se hizo de rogar el inicio del show unos minutos, pero una vez comenzó a rodar la máquina ya no hubo vuelta atrás. “Stand Up” fue su presentación sobre las tablas de la Sala Wolf y ya quedó claro que el peso de la banda lo llevan su vocalista TJ Lyle y las guitarras de Riley Couzzourt. Y este último fue el que durante toda la actuación dió un poco más de su presencia escénica además de su técnica.
La voz de TJ Lyle te lleva a veces a recordar a Paul Rodgers, pero aún lejos de poder tener algún rasgo identificativo más propio. Avanzó el show con “Lay Your Shoes On”, un tema inédito, y “Take It Slow” antes de lanzarse con la primera de las versiones de la noche. Teniendo The Georgia Thunderbolts solo un par de trabajos en la calle es normal que tiren de temas ajenos para completar repertorio. Al menos en la primera de ellas se salieron algo de los clichés. Aparecida ya en su primer disco “Be Good To Yourself”, popularizada por Frankie Miller, fue gratamente recibida por la sala Wolf. “Can I Get A Witness” también trajo consigo algunos versos de un tema algo más esperable como “Midnight Rider”.
“Rise Above It All” dejó buenos duelos entre las guitarras. Acústica en mano fue el turno de recordar a Hank Williams y su “I Am So Lonesome I Could Cry”. El espíritu de Bad Company volvió a sobrevolar en la Wolf con “Rock and Roll Record” en la que TJ Lyle se sentó a los teclados para interpretarla. Recuperó la guitarra acústica para interpretar un fragmento “Tuesday ‘s Gone” de Lynyrd Skynyrd que sirvió como preámbulo de “Crawling My Way Back to You”. La electricidad volvió a fluir gracias a “Little Joe”, “Moonlight Play” y un “It ‘s Alright” que dejó uno de los mejores momentos a las seis cuerdas por parte de Riley.
El blues de Willie Dixon “You Shook Me” permitió lucirse a la voz y a la armónica a TJ Lyle antes de volver a los temas de cosecha propia como ese contundente “Pricetag”. Descanso para la banda, que dejaron al vocalista solo para que tocara una prescindible versión del clásico “Stand By Me”. La banda retornó al escenario para rematar “Looking for an Old Friend”, uno de los primeros temas que compusieron como conjunto. No faltaron a la cita unas twin guitars al uso sureño para “Wait”. Con “She ‘s Gonna Get It” terminaron el set antes de pasar a una ceremonia de los bises en la que Riley tomó la iniciativa para pedir más canciones.
Reconozco que la vuelta con “I Ain’t the One” de Lynyrd Skynyrd me sorprendió por salirse un poco de la norma viendo el resto de versiones de la noche, además de ser muy bien ejecutada. El broche al concierto lo puso “Lend A Hand”. Un cierre en el que la sala Wolf echó el resto a una velada en la que el público en general disfrutó de lo lindo. The Georgia Thunderbolts son una buena banda, pero les falta algo que los haga especiales y únicos. Todo te recuerda a algo que ya has escuchado y aún no veo temas que llamen a ser recordados. TJ Lyle tiene una buena voz pero no sabría diferenciarla de otras muchas de la nueva oleada.
Seguro que a más de uno en la sala le pareció un bolazo. En esta ocasión yo no tuve esa conexión con una banda que necesita soltarse más en directo y dejarse de manidas versiones. Salvo Riley que puso algo más de su parte el resto permanecieron en un discreto segundo plano. Incluso el vocalista aún podía haber ejercido más de frontman. A su favor tienen el tiempo y que son buenos músicos, así que no todo está perdido. Y tienen algo muy positivo, que es ese espíritu de mantener vivo un estilo de música como el Southern Rock en vez de dejarse llevar por algo más popular.
Fotos: Dirty Rock Magazine