Indignación por expulsión arbitraria en el Festival RaboLagartija

En un país que se dice democrático, donde supuestamente rige el principio de igualdad ante la ley, asistimos una vez más a una situación que roza lo surrealista. El pasado viernes 15 de Agosto en la localidad alicantina de Villena se celebró un año más el festival RaboLagartija. Uno de nuestros lectores que había accedido legalmente al evento con una entrada legítimamente regalada, fue expulsada del recinto de manera arbitraria y sin justificación clara. La escena se tornó aún más alarmante cuando un guardia de seguridad procedió a cortarle (literal, con unas tijeras) la pulsera de acceso sin explicación convincente. La única razón… “porque sí, sales por donde has entrado”. Este acto no solo resulta humillante y carente de toda lógica, sino que apunta directamente a una práctica preocupante, la discriminación por pura apariencia o porque el careto del individuo no es del agrado de la organización. Parece ser que el rostro, el estilo o que tengas la suerte de que te regalen una entrada incomoda a algunos organizadores, quienes, lejos de rendir cuentas, se sienten con el derecho de actuar como jueces y verdugos en sus propios feudos privados disfrazados de eventos públicos. Para colmo, la situación escaló con el asedio de la Guardia Civil, sumándose a la presión con actitudes intimidatorias y acusaciones infundadas. ¿Estamos ante un nuevo tipo de “limpieza estética”? ¿Desde cuándo el criterio para permanecer en un evento depende del agrado visual o ideológico del organizador? ¿Desde cuándo es delito que te regalen una entrada? Conviene recordar que regalar una entrada NO es un delito. Cualquiera es libre de cederla a quien desee… o acaso hay que pedir el consentimiento al organizador?? Esto es para mear y no echar gota!!! Si esto molesta al organizador, el problema no está en el invitado, sino en quienes creen tener potestad sobre los derechos fundamentales de los demás. Lo que ocurrió no es solo una falta de respeto, es una vulneración del derecho al libre acceso, a no ser discriminado y al trato digno. De nuevo el desamparo y la impotencia se adueña de l@s más indefens@s que ven como cualquier acto de reclamación es toparse con un muro. Su palabra no tiene valor ni credibilidad ¿que motivo justificado hizo que el guardia de seguridad cortase la pulsera a este individuo? El pasado 15 de Agosto le pasó a una persona. Mañana puede pasarte a ti. 

 

More from Equipo de redacción de Dirty Rock Magazine

Schizophrenic Spacers, The Kleejoss Band y Saturna dan valor de ley al Billion Dollar Fest

Crónica de la primera edición del Billion Dollar Fest en la sala...
Leer Más

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.