«Everything Harmony», se llama el cuarto y maravilloso álbum de estudio del grupo neoyorquino The Lemon Twigs, de los hermanos Brian y Michael D’Addario.
Trece canciones como trece soles nos ofrecen The Lemon Twigs, un maravilloso decálogo de melodías donde todas sus influencia glam rock, power pop, baladas setenteras del Laural Canyon y folk pop barroco se ven reflejadas en los casi 50 minutos que dura el disco.
Sinceridad y exuberancia es un escándalo de disco «Everything Harmony» donde los vestigios de aquellos clubes folk de Greenwich Village, desaparecidos hace mucho tiempo como los rastros de humo de cigarrillo que se arrastran de las desgastadas mesas de madera y los músicos callejeros en la acera. por dinero de cerveza y una caja resuenan por todas partes.
Los Lemon Twigs mantienen en este disco ese aire de los trovadores callejeros manteniendo su sensibilidad popular. En ningún lugar de este 2024 te digo que encontrarás baladas de amor más hermosas que estas, grandioso en la sutiliza de la melancolía y arreglos.
Disfruta de estos trece temazos que se sienten como un largo viaje a través de montañas y comunidades rurales. Un álbum que es un sueño soñado por cualquiera que tiene miedo de crecer en una era que no entiende o no cree que disfrutará. En la que sus instrumentos no suenan como instrumentos, no de la manera que los Beatles, Beach Boys, Simon & Garfunkel o Big Star querían lograr en alguno de sus discos o, estos instrumentos simplemente no suenan familiares, forman el ruido de una tarde soleada de ensueño, un lugar intocable donde lo desconocido no figura en la ecuación y la comodidad familiar, cálida y esponjosa de la adolescencia simplista gobierna las ondas de radio. El brillo y la belleza en «Everything Harmony» resplandece en cada surco. Uno de los discos del año.
