Michael Schenker nos hizo volar con su UFO en Barcelona

Las giras de aniversario están, para lo bueno y lo malo, a la orden del día. En esta ocasión fue Michael Schenker el que quiso darse el homenaje y traer un repertorio basado exclusivamente en los años que pasó en la banda UFO. La nostalgia es un valor seguro y consiguió llenar una Sala Apolo que vivió una de esas noches que rozan la perfección.

Una primavera a medio llegar y un lunes frío y lluvioso como protagonista hizo que en la apertura de puertas no hubiera más de cincuenta personas esperando a entrar en la Sala Apolo. La temprana hora tampoco ayudaba, pero estaba claro que llegado el momento en que Michael Schenker saltara al escenario, la sala estaría llena. Y es que los escasos años que estuvo en las filas de UFO fueron de lo más provechosas. Diría incluso que esa fue la etapa más brillante del grupo. Y si no, como muestra un “Strangers In The Night” que está considerado uno de los mejores discos en directo publicados. A pesar de salir de la banda en su momento por no sentir como propio ese proyecto, nunca ha renunciado a esa época y ahora, cincuenta años después le rinde sincero homenaje. 

20250505-Michael-SchenkerDSI_2406©DesiEstevez

La gira sufrió un importante e inesperado contratiempo. Tras la fecha de Villava, Erik Grönwall tuvo que volar urgentemente a Suecia por un grave asunto familiar médico relacionado con su padre. Por suerte, tantos años de carrera ha de suponer una cartera de contactos importante y el problema tuvo rápida solución. El encargado de defender un repertorio lleno de clásicos fue Roberto Dimitri Liapakis, que tuvo apenas 24 horas para prepararse antes del concierto de Madrid. ¿Se notaría tras un solo concierto con la banda el parche? Para llegar al momento de sacar conclusiones antes teníamos que pasar por el par de bandas que completaban el cartel. Los primeros serían los suizos GUT’S. 

20250505-Michael Schenker DSI_2276©DesiEstevez

Concentrados en el poco espacio disponible que implica tener tres sets diferentes sobre el escenario, los cinco miembros salieron a por todas. Con una sala que apenas se había llenado, GUT’S comenzó su descarga. Resulta imposible describir el sonido de la banda sin referirse a AC/DC. Los movimientos de su guitarra solista, las rítmicas, el timbre de voz de su cantante… todo recordaba a los australianos. Al menos no cayeron en el recurso fácil de las versiones y presentaron un corto pero intenso set. Canciones como “High As Noise”, “Danger Stripper” o “Nuts on the Gun” suenan 100% al boogie rock de AC/DC. Y como siempre pasa, lo más sencillo suele ser más fácil de asimilar, y contagiaron su empuje al público que iba llenando la sala. Puedes decir que son un calco, pero supieron dar diversión sin pretensiones, lo cual se agradece. 

20250505-DSI_2362©DesiEstevez

Los siguientes en subir al escenario serían los alemanes HumanZoo. Con veinte años de carrera a sus espaldas, y su reciente “Echoes Beyond” (Fastball Music 2024) bajo el brazo trajeron su dosis de hard rock melódico. Enérgicos desde su “Hello!, Hello!” inicial, mantuvieron un buen nivel y dieron buena cuenta de su último disco. Fueron cinco los temas que sonaron incluyendo al inicial: “Gun 4 a While”, “Echo”, “To The Ground” y “Ghost In Me”. El punto de relativa originalidad lo pone el protagonismo del saxofón como instrumento más allá del mero acompañamiento. Un saxo que no se pudo escuchar en su plenitud hasta avanzado el concierto. Remataron su show con “Crowd’s On Fire” y “Love Train”. Buen hacer, muchas tablas pero nada nuevo bajo el sol. Y todo un mundo esperando a “The Mad Axeman”.

20250505-Michael-SchenkerDSI_2285©DesiEstevez

Con “The Inmigrant Song” sonando por los altavoces comenzaron a salir los miembros de la actual Michael Schenker Group. Posiblemente sea la formación con menos renombre a nivel individual que haya tenido, pero… ¿sería así la estrella capaz de brillar? Cierto es que todos son viejos conocidos del guitarrista pero sobre el papel ninguna gran figura. Solo Erik Grönwall le daba un punto extra al cartel, pero su caída repentina ponía cierto suspense. Con “Natural Thing” ya fue suficiente para resolver cualquier duda. La fluidez de los dedos del guitarrista quedaba patente en cada riff y solo, y la solidez de la banda era suprema. Y de la voz… nada malo que decir. Aprenderse un repertorio de dieciséis temas en dos días y defenderlo como lo hizo Liapakis me parece de admirar.

20250505-Michael Schenker DSI_2455©DesiEstevez

También destacar al guitarrista y teclista Steve Mann con el que Schenker tuvo varios duelos interesantes durante el concierto. Un repertorio imbatible en el que iban cayendo uno tras otro los grandes temas de la etapa dorada de UFO. Algo así como tener nuestro propio “Strangers in the Night” privado. Con su eterno gorro el fino guitarrista repartía riffs y muecas de satisfacción con las primeras filas. Mientras, “Only You Can Rock Me”, “Hot n Ready” o ese “Doctor, Doctor” eterno con el que Iron Maiden abren sus conciertos sonaban a gloria. Con todo el público coreando al unísono parecía que se había conseguido disolver cualquier rastro del mal día que nos había acompañado.  

20250505-Michael-SchenkerDSI_2241©DesiEstevez

Con “Mother Mary” me hicieron particularmente feliz y pudimos asistir a otro duelo entre Schenker y Mann, en el que los grandes ganadores del mismo no éramos otros que la audiencia. Acompañado de su inseparable Flying V sin pasar por la “peluquería” y sin dar ni tregua ni descanso entre canciones fueron marcando un excelente camino a seguir. Una senda conformada por “This Kid ‘s”, “Lights Out”, un pequeño medley instrumental compuesto por “Lipstick Traces” y “Between the Walls” para llegar a “Love To Love”. Sólo por estos ocho minutos que duró el tema ya se pagaba la entrada. Un claro ejemplo de que no siempre es necesario batir récords de notas para impresionar y que aparezca la magia. 

20250505-MSDSI_2274©DesiEstevez

Si alguno tenía alguna duda sobre si se estaba disfrutando del espectáculo, podría encontrar su respuesta en ver cómo el público acompañaba “Let It Roll”. “Reasons Love” fue lo más parecido a la calma antes de que se volvieran locos con “Rock Bottom”, alargado hasta más allá de los diez minutos para deleite y placer de los sentidos. Un Michael Schenker pletórico se encargaba de hacer fotos a una mano mientras la otra ligaba notas en el mástil de su Flying V. Él mismo se encargó de presentar al resto de la banda y cuando parecía que la banda se retiraba para la ceremonia de los bises, decidieron ahorrar ese trámite. Aun con el solo de batería final retumbando, arrancaron con “Shoot Shoot” para terminar con un “Too Hot To Handle” dedicadas a Pete Way y Paul Raymond.

20250505-Michael Schenker DSI_2466©DesiEstevez

Una gran velada de rock en la que Michael Schenker brilló por encima de todas las cosas y al que tengo que agradecerle que no estirara el show con innecesarios solos instrumentales sin sentido. La decepción de no poder ver al ex-cantante de HEAT desapareció gracias al buen hacer de Liapakis, y poder ver de cerca a Schenker aún en estado de gracia hizo que fuera un concierto de esos que se quedan en la memoria. 

Fotos: Desi Estévez

Escrito por
More from Sergio Leiva

Kamasi Washington y su movimiento arriesgado

No parece que Kamasi Washington esté dispuesto a que cada nuevo paso...
Leer Más