El cantautor mallorquín Tomeu Penya celebró toda su carrera musical dentro de la programación del festival Empremtes. El Casino l’Aliança del Poble Nou disfrutó de las canciones y anécdotas del músico de ses illes.
76 años son un motivo más que suficiente para celebrar cualquier cosa. Y si de esos, más de la mitad han sido dedicados a la música, razón de más. Tomeu Penya ha sido siempre una rara avis dentro de la canción hecha en catalán, alejándose de la canción de autor más arraigada a estas tierras mediterráneas para dejarse llevar por los aromas del country. Bajo las alas del Festival Empremtes, el mallorquín fue capaz de llevar casi al lleno el Casino de l’Aliança del Poble Nou. Un público que le ha seguido durante 45 años de carrera y que no perdieron la ocasión de agradecerle con aplausos la influencia en sus vidas.
En un escenario desnudo de instrumentos, solo una mesa llena de papeles y dos sillas llenaban el espacio. Con unos minutos de cortesía para dejar que terminaran de acomodarse a los invitados de esta fiesta musical, salió Tomeu Penya al escenario. Con su inconfundible sombrero y una guitarra comenzó su repaso con “Sa millor amiga que tenc” a 45 años de carrera. A paso tranquilo pero directo a barraca, se encargó de ir desbloqueando recuerdos anclados en sus canciones a una platea que respondía emocionada con sus aplausos. “Maria”, “L’amor” o “Pedra Foguera” mostraban su lado más “romántico, vicioso, pero muy romántico” de Tomeu Penya. Por otro lado “Rock & Roll”, “Barcelona Girls (amb bon vi mallorquí)” o “Morenassa” dejaban ver su lado más canalla. Y todo salpicado con divertidas anécdotas que confirmaban que a nuestro mallorquín siempre le ha gustado el buen vivir.
Pero un músico nunca deja de estar acompañado en su historia. Por eso a mitad de concierto invitó al escenario a Simó Pocoví, amigo y compañero de fatigas durante muchos años para un plus de complicidad y segundas voces. El dúo tuvo una invitada especial para una versión bilingüe de “Have You Ever Seen The Rain” de la Creedence Clearwater Revival. Su hija Alexandra apareció para acompañar con su dulce voz los graves tonos de su padre. No fue esta la única versión que sonó esa noche. Y es que Tomeu Penya siempre ha tenido buen gusto para escoger en catálogos ajenos.
Kris Kristofferson y “Pels bons temps (For the good times)”, Kenny Rogers y Dolly Parton (compuesta por Bee Gees) y “Illes dins d’un riu”… Aunque también es capaz de bucear en la música más cercana recordando a Antonia Font y su “Alegría” o “Coses del idioma” de La Trinca. Se permitió el lujo de incluir un tema nuevo y terminar el set con un fragmento de “Mallorquins i catalans” dentro de “(Hey Baby) ¿que pasó?” de Texas Tornados. Un par de minutos para generar la expectativa necesaria de los bises y terminar el viaje por su cancionero en el que no faltó “El dimoni dins jo”. Un total de dos horas de canciones y divertidas historias con las que estoy seguro que nadie salió decepcionado.
Días antes del concierto alguien me formuló una sencilla pregunta… ¿Por qué Tomeu Penya? La respuesta es sencilla ¿Y por qué no?. Durante toda la vida hemos escuchado y le hemos dado cova a las historias que desde el otro lado del atlántico nos han llegado. Incluso hay quien le da credibilidad a bandas más españolas que un cocido cantando en inglés historias tan lejanas a nosotros como el desierto de Sonora. Así que…¿por qué no dar voz a alguien que usa el country para cantar al costumbrismo en su lengua materna? Grande Tomeu Penya! Y que podamos disfrutar de su voz grave durante muchos años más.
Fotos: David Holgado