Javier Vargas ofreció en Tenerife su popurrí de versiones
porJavier Vargas, Appice, Shortino y Luis Mayol visitaron Tenerife el 3 de marzo de 2012 para ofrecer su popurrí de versiones.
Javier Vargas, Appice, Shortino y Luis Mayol visitaron Tenerife el 3 de marzo de 2012 para ofrecer su popurrí de versiones.
C.W. Stoneking & his Primitive Horn Orchestra inundó la jungla de Barcelona (Sidecar) y Cataluña el pasado 18 de febrero con su extraordinadio Blues y Jazz oscuro del Delta del Mississippi con sus inseparables Primitive Horn Orchestra, con Ros Jones (tuba), Ed Farlie (trompeta), Kynan Robinson (trombón) y Kirsty Fraser a la voces. Las similitudes con un joven Dylan en su época más “chaplinesca” sobre el escenario y un Tom Waits con ese tono cavernoso que sale de su garganta, son simples clichés que algunos quieren darle a este “bestia” de la música, C.W. Stoneking, es mucho más que eso, en sus dos discos que repasoe esa noche en Barcelona King Hokum (2006) y Jungle Blues (2008), su música nos empapa de ese algodón de cualquier plantación del sur de Estados Unidos, al ragtime, calipso, y a los ambientes cabareteros más sucios y humeantes.
Iron Butterfly perfumó Tenerife la noche del jueves 23 de febrero de 2012, con la más pura y genuina esencia de la psicodelia de los 60’s.
Catwalk brilló en el Festival Alter Native Generations 2012 celebrado el sábado día 4 de febrero de 2012 en Los Realejos, Tenerife, Canarias. El directo de Catwalk este sábado había que verlo para creerlo. Su tecno-rock vigoroso hizo guiños a estilos tan variados como el glam de lo 70’s, el reggae o el dubstep.
Soulamente Soulo son una banda de Hip hop con instrumentación real, compuesta con músicos brutales, velocidad de vértigo y ejecutándola como si estuviesen en un acelerador de partículas.
La contundencia melódica de los palmeros hacen que cada canción se convierta en un himno tras otro, no son de East L.A. o del South Central, provienen de la isla de La Palma, Breña Alta, y alternan denuncia y conciencia, cal y arena, rimas que desarman por su ingenio y especialmente por esa ironía que parece inmunizarlos ante las rapaduras de desprecio, desde muchos críticos y revistas musicales en el archipiélago.
“Un ardiente relato de pólvora y sangre”, así definiría lo visto el pasado 20 de enero en la Sala Rock Palace de Madrid con las actuaciones de Pablo Galiano primero y de Delta Hot a continuación.
Pablo Galiano nos llevó definitivamente, a punta de revólver, a todos los forajidos que nos dimos cita en aquella fría noche madrileña, una auténtica y exquisita tragedia en territorios Delta del Mazanares y pantanos sureños del Butarque.
Keith Richards comenta en su último libro de memorias “Life“ que “Dios no se molestó en hacer dos garitos distintos, cielo e infierno”.
One! Two! Three! … y el concierto explotó con “Ghosts in the Wire”. Danny y sus intrépidos, sacados de cualquier película de John Ford, se plantaron al borde del escenario, volumen ensordecedor. Paul Lush a la guitarra, Chris Clarke al bajo y Steve Brookes a la batería, con Rosalie Deighton a la guitarra y coros y ‘Free Jazz’ Geoff a los teclados y saxo, componen los campeones del mundo. Todo el concierto y los temas de su «Hearts & Arrows» fueron un aquelarre de guitarras.
Keiko regalaron su brillante creatividad anoche, sábado 21 de enero de 2012, en un concierto precioso e inolvidable.
Los tinerfeños Grenouille se alzaron entre los cuatro finalistas consiguiendo el primer premio, dotado con seis mil euros. Los palmeros Soulamente Soulo, tuvieron que conformarse con el segundo premio, dotado con tres mil euros, después de que el jurado tuviera que deshacer un empate con Grenouille. Los otros dos finalistas fueron los tinerfeños Fran Baraja y La Banda Reparte y los conejeros Ciempiés Ni Cabeza. Los cuatro finalistas fueron seleccionados, por un jurado distinto, entre 112 bandas presentadas.
Maika Makovski (voz, piano y guitarra acústica), David Martínez (batería), Juan Carlos Luque (bajo y coro) y Oskar Benas «Benitt Ash» (guitarra eléctrica y coro), envenenaron con una sobredosis de poción mortífera de pasión, a una variada audiencia de emperatrices, amigos, vagabundos y bastardos, que terminó soñando dentro de un sueño, antes de lo previsto porque un truco diabólico dio al traste con la Gibson SG del prodigioso donostiarra Benitt Ash.
El concierto, un viaje encantadoramente rebelde en el que Maika nos llevó de la mano desde lo más hipnótico-magnético hacia un envolvente explosivo, descrito en letras y armonías sencillas con texturas musicales endiabladas.