“La carretera, el camino está plagado de vivencias y todo sirve. Las cosas que te marcan son las que tienen que ver con el éxito y el fracaso. La parte amarga, tiene que ver con la falta de apoyo. Sentir que transitas por un desierto con poca agua”
Un disco delicado, rico y lleno de grandes momentos. Descúbrelo en nuestra entrevista Xavi Malacara y dándole al play de “Miles Down Blues” mientras lo lees. Entrevista a Malacara & Wilson Band: Nuevo disco de Malacara & Wilson Band con “Miles Down Blues” ¿qué nos podéis contar de todo ello Xavi? Pues como siempre que editas algo nuevo, esperanzados de que llegue a mucha gente. Encantados de que “Acaraperro Producciones” lo edite. Es un disco con buenas canciones y una excelente producción. Es una joya envuelto en una cover de lujo a cargo de Berto Martínez. De verdad que merece la pena escucharlo. Estamos recibiendo muy buenas críticas. El panorama es árido. Así que las buenas noticias son bien recibidas.“Ser músico no es una elección. Lo eres o no lo eres. Tuve un momento de duda de si no me estaba empecinado. Un viaje por Memphis y New Orleans me solucionó la duda”
Karma Police, Milkers, proyectos en solitario y Malacara. El proyecto Malacara tuvo sus inicios hace más de una década junto a Fran Iturbe, guitarrista de Mikel Erentxun o Bunbury, grabasteis dos trabajos entre 2007 y 2010. Instalándoos en la ciudad de Los Angeles hasta su disolución. Regresas a la península y conoces al británico Tony Wilson y arrancas con un sonido totalmente diferente con Malacara & Wilson Band, grabando Blues Vol. 1. Han pasado casi 25 años desde Karma Police. ¿Ha valido la pena llegar hasta aquí y qué aspectos te han marcado en tu trayectoria musical y qué situaciones han atravesado alguna de tus canciones? Has hecho un resumen exacto de por donde he pasado. Y el paso del tiempo asusta. 25 años desde Karma Police, es mucho! Respondiendo a tu pregunta. Todo ha merecido la pena. Ha sido un camino lleno de obstáculos y de momentos inolvidables. La carretera, el camino está plagado de vivencias y todo sirve. Las cosas que te marcan son las que tienen que ver con el éxito y el fracaso. Entre los éxitos, tener una colección de canciones que merecen la pena. Algunos momentos álgidos en actuaciones multitudinarias. Reconocimiento al trabajo bien hecho y la gente, sobre todo músicos con los que he colaborado y que han hecho parte del camino. La parte amarga, tiene que ver con la falta de apoyo. Sentir que transitas por un desierto con poca agua. Por poner un ejemplo de situaciones que han vivido alguna de las canciones. En el primer disco de Karma Police hubo una canción “Moderate Unhappiness” que editaron varias revistas en España y en UK. Un chico en la universidad la escuchaba. Ese chico es Luis Aznárez, ahora es bajista con el que he trabajo desde hace años y ya es parte de mi familia. Creo que eso es lo mejor que me ha pasado con alguna de mis canciones. ¿Cómo y en qué momento llegó Mario Cobo al proyecto Malacara & Wilson Band produciendo todos vuestros discos? ¿Qué significa para ti el estudio de grabación y la labor de un productor en cada proyecto? Seguía a Mario desde la época de Nu Niles. Mario toca todos los palos de la música del género. Contacté con él para el primer disco y ya no nos hemos separado. Me gusta trabajar con Mario. Es una garantía y saca lo mejor de la banda. Respecto al tema del estudio. Cada vez me siento mejor. El estudio es un test, una prueba de resistencia. Tienes que dar lo mejor y superar dificultades. Tiene un punto de estrés. Por otro lado me gusta el ambiente que se crea con el resto de la banda. En el estudio, todo el mundo tiene un estado de pertenencia y compromiso. Respecto de la labor del productor, para mi, es imprescindible. Tiene un peso en la creación, que no siempre es reconocido. He trabajado con productores que pretenden cambiar la esencia del grupo, esto es fatal. Y otros, como Mario Cobo, que te rescata cuando estás en un lío y te abre puertas para que salgas de tu zona de confort. ¿Qué significa “Miles Down Blues” y sus ocho nuevos temas? “Miles down blues” es el último disco de una trilogía que empezó en 2015. Tres discos que dejan un puñado de buenos temas. Estas ocho canciones describen el camino por donde hemos pasado. Las letras, a veces hirientes, hablan de situaciones vividas. Cada track es un viaje, una película. Un trayecto por bares casi vacíos. Situaciones que te llevan a conducir por carreteras secundarias. El disco lo cierra “L’appel du Vide”. Una llamada al vacío.“En España, la música se considera entretenimiento. Hay un complejo para ver las cosas del business. Aquí nos quejamos por todo y esto nos quita energía y posibilidades. Falta profesionalizar a todos los que formamos parte. Salas, sellos, grupos, necesitamos creernos que esto es un negocio. Exigir y exigirnos”
“La Peixera” (2017) y “El Funeral de Mary-Lin” (2019) son dos bandas sonoras para dos obras teatrales en la que has participado junto a Mario Cobo y otros músicos como Malacara. ¿Qué nos puedes contar de esas dos experiencias y si hay algún proyecto similar para el futuro? Desde que empezamos, nuestros temas han sido la BSO de diferentes obras de Teatro, algunos cortos y web series. Nos sentimos halagados y esto ayuda a la promoción de la banda, de los discos y al final vendes unas cuantas copias más. Me emociono al ver escenas de teatro donde nuestra música es la protagonista. Es como dar otra oportunidad a la canción. Como una tercera dimensión. ¿Es cierto que Tony Wilson ha decidido retirarse con tu nuevo trabajo “Miles Down Blues”? ¿Quién es Tony Wilson y cómo lo conociste Xavi? Tony Wilson es un tipo que merece la pena. En los 60’s giró por Europa y UK junto a Yardbirds, Solomon Burke. Los grandes. Es un guitarrista excelente. De formación clásica, ha hecho arreglos de mucho nivel en nuestros discos. Escuchar sus historias de los 60 en Londres, es como leerte la biografía de Keith Richards. Lo voy a echar de menos, voy a echar de menos nuestras largas conversaciones.“Me gustan las letras de Charley Patton, me fascina la construcción de las metáforas de Hank Williams pero Bob Dylan es el maestro”
¿Cuál es la clave del éxito más allá del talento nato de un músico? Lo actitud muchas veces supera la técnica, ¿no? Es la suma de lo mejor. Hay unos mínimos, tiene que haber mucho trabajo, buenos músicos. Pero la actitud es todo. Hay gente que ejecuta perfectamente y no transmite nada. Esto para mi es lo peor. Como cualquier disciplina artística, el error forma parte de la creatividad. Tiene que existir la técnica, pero también cosas que explicar para llegar al otro lado. ¿El blues y la música de raíces norteamericana es una forma de vida? Sabemos que hay un mundo de matices… ¿pero cuál es el tuyo? Pues vivo dedicado a mi música. A escuchar los clásicos. A seguir lo que se hace ahora. Hurgar por las tiendas de segunda mano. Buscar ropa, instrumentos vintage. Mucha lectura. Aprovecho para recomendar el libro “Really the Blues” de Mezz Mezzrrow. Una biografía de un tipo que pasa su vida buscando un sonido. Así me siento yo. En ese camino ando. ¿Qué echas de menos de la prensa musical especializada en nuestro país, promotores, salas y público? Pues de la prensa especializada del país, decir que hacen una gran labor de difusión. En un entorno complicado, la lucha entre el papel y la distribución digital. Pero hay buena oferta, que además apoya las bandas locales. Promotores y salas que se la juegan con poco apoyo. Sin embargo el género se sostiene porque hay una legión de seguidores fieles. Aún así falta apoyo institucional para crear una industria estable y no precaria, como la que tenemos. El 21% del IVA y esas cosas, no ayudan. En este país nos falta mucho. En países como Francia, esto se cuida. Pero es lo que tenemos. Y con esto tiramos.“El Rock y el Blues tienen larga vida. Hay gente que está actualizando una música que tiene más de 100 años. Unos ejemplos: Pokey Lafarge, CW Stoneking, Fantástic Negrito. Estos tipos ofrecen una visión muy atractiva de la música de raíces”
¿Qué importancia han tenido los bares en su vida? Toda la importancia. Siempre me he matado por tener una residencia en locales de Barcelona. Llevo años he tocando semanalmente en bares de la ciudad. Eso me ha hecho como músico y me ha dado la energía para seguir. Recuerdo las noches del Kennedy en el Port Olimpic, las noches del Pastís o el London. Tocaba en solitario o con Milkers, Karma Police y más tarde con Malacara. De improvisaciones, surgen nuevas ideas. De las charlas entre canciones puedes tejer el próximo espectáculo. Se lo recomiendo a cualquiera que se dedique a esto. ¿Te has levantado en medio de la noche a apuntar algo para una canción? Es buena esta! Claro. Lo peor es lo que no puedes apuntar. Estás soñando la canción de tu vida. La oyes con nitidez, a veces con la rever de la sala. Te despiertas y no recuerdas nada. Pero si, hace años tenía una moleskine en la mesita por si era necesario. Ahora con el notes del teléfono lo solucionas. Cada día escribo. Tomo nota de ideas que acaban en mis letras.